El presidente Donald Trump presentó su propuesta para rechazar el obstruccionismo directamente ante los republicanos del Senado el miércoles. Una vez más dicen gracias, pero no gracias.
Trump pasó varios minutos durante un desayuno con senadores republicanos en la Casa Blanca instándolos a eliminar el requisito de una supermayoría de 60 votos para la mayoría de los proyectos de ley y reabrir el gobierno según líneas partidistas, aun cuando reconoció que los republicanos podrían no hacerlo y dijo que en última instancia respetaría sus “deseos”.
“Es hora de que los republicanos hagan lo que tienen que hacer”, dijo Trump. “Si no pones fin al obstruccionismo, estarás en malas condiciones”.
Pero los líderes republicanos del Senado rápidamente reiteraron que eso simplemente no está sucediendo.
“He dicho antes que no hay votos allí”, dijo el líder de la mayoría John Thune (R-S.D.), y agregó que Trump “podría tener cierta influencia sobre los miembros, pero sé dónde están los cálculos sobre este tema en el Senado”.
En privado, los republicanos reconocen que no están ni cerca de tener los votos para cambiar las reglas. Sen. John Barrasso (republicano por Wyoming) señaló la cantidad de senadores republicanos que recientemente respaldaron el obstruccionismo y agregó que Trump está “muy en sintonía con las realidades políticas”.
Varios senadores republicanos también reiteraron el miércoles que no apoyarían un cambio. La oposición de sólo cuatro de los 53 republicanos del Senado podría frenar en seco la demanda de Trump.
“Nunca votaría a favor de bombardear el obstruccionismo”, dijo el senador. Thom Tillis (R-N.C.) dijo a los periodistas.
Sen. Mike Crapo (R-Idaho) dijo de manera similar en una entrevista: “Hace mucho que digo que no apoyo el obstruccionismo nuclear”. James Lankford (R-Okla.), miembro del liderazgo republicano del Senado, calificó el obstruccionismo como un “aspecto importante de cómo opera el Senado”.
La firme oposición no ha impedido que Trump golpee a los republicanos, argumentando que los demócratas lo harán cuando tengan el control. Los republicanos se han resistido a cambiar las reglas en parte porque les perjudicaría una vez que volvieran a ser minoría.
Trump pareció reconocer el miércoles que no tiene los votos, pero dijo que esperaba influir en algunos senadores. “Voy a seguir tus deseos”, dijo, “pero es un tremendo error”.
Nicholas Wu y Hailey Fuchs contribuyeron a este informe.
