Representantes. Ralph Norman y Keith Self recibieron llamadas telefónicas del presidente electo Donald Trump entre sus votos iniciales contra el presidente Mike Johnson y sus eventuales cambios para apoyarlo, según dos republicanos a quienes se les concedió el anonimato para hablar con franqueza.
Pero lo más notable es que ambos y otros reticentes lograron compromisos generales de Johnson y otros republicanos acerca de que la conferencia republicana trabajaría de manera más colaborativa, dijeron los dos republicanos.
“Sus llamadas individuales no fueron lo que logró que se lograra”, dijo uno de los republicanos, refiriéndose a las llamadas de Trump. Un puñado de republicanos repitió el mismo sentimiento.
Self confirmó que habló con Trump varias veces y lo calificó de “animado”. También dijo que él y Norman querían transparencia en el proceso de reconciliación presupuestaria, que los republicanos planean utilizar para aprobar una legislación ambiciosa sobre la frontera, la energía y los impuestos.
“Tenemos que asegurarnos de que este Congreso sea lo más fuerte posible cuando nos enfrentemos al Senado sobre el paquete de reconciliación, porque hay debates sobre cómo será el paquete de reconciliación. Así que eso es todo lo que quería hacer hoy: lograr que este Congreso sea un éxito para la agenda de Trump”, dijo Self.
Norman dijo que cambió de opinión porque “Mike nos dio la seguridad de que iba a luchar por todo a medida que avanzaba”. Nancy Mace (R-S.C.) los conectó y que la llamada salió “muy bien”.
“Simplemente destacó que Mike es el único que puede ser elegido, que es agradable, lo cual yo sabía”, dijo Norman. “Simplemente le impresionamos a Mike la seriedad de lo que está a punto de hacer. ¿Va a luchar por paradas financieras?